septiembre 02, 2009

Bicentenario de Venezuela


Los preparativos para celebrar el Bicentenario de la Independencia de Venezuela avanzan en la web
La comisión presidencial para la celebración del Bicentenario de la Independencia abrió un sitio web conmemorativo de tan importante e histórica fecha.
Con artículos, efemérides Venezolanas y latinoamericanas, información sobre el bicentenario de la independencia en países hermanos, y muchos otros contenidos interesantes se puede uno encontrar en www.bicentenario.gob.ve

Comisión presidencial
La Comisión Presidencial para la Conmemoración del Bicentenario de la Independencia de la República Bolivariana de Venezuela fue creada mediante el decreto N°6.015 -publicado el jueves 17 de abril de 2008 en la Gaceta Oficial N° 38.912- con el fin de programar los actos concernientes a la celebración de la Independencia, los cuales se realizarán durante el período comprendido entre el 19 de abril de 2009 y el 5 de julio de 2011.
En ocasión de celebrarse los doscientos años del movimiento inicial, definitivo y trascendental de la Emancipación de la República Bolivariana de Venezuela, el Estado Revolucionario asume el compromiso de contribuir a rescatar y esclarecer el significado histórico de tan relevante fecha que dio nacimiento a la Patria Venezolana, así como de valorar su significado actual en términos de reafirmación del derecho de los pueblos a su libertad y autodeterminación.

¿Cómo concebimos la celebración del Bicentenario de las Independencias Americanas?
La concebimos como la presencia entre nosotros de un proceso que comenzó a fines del siglo XVIII y aún continúa.
Concebimos la celebración del Bicentenario de las Independencias, como un proceso vivo y actual, en el que todos debemos participar, porque nos corresponde como generación, concluir el proceso, que se inició en el siglo XIX y aún no concluye.
La concebimos como un proceso con tanta pertinencia en lo actual, que debemos enfrentar todas las distorsiones y tergiversaciones que se pretendan hacer de ese proceso.
La concebimos como un proceso nuestro americano que incluye a todos los pueblos que desde el siglo XIX luchan por su liberación.
La celebración de los Bicentenarios deben convertirse desde Venezuela en una fiesta popular en la que los pueblos nuestroamericanos sean los protagonistas. Las actividades desplegadas deben superar el carácter estrictamente oficial y académico que solían tener este tipo de eventos en tiempos de la cuarta república.
El protagonismo del pueblo debe expresarse en todas y cada una de las actividades incluyendo aquellas consideradas tradicionalmente como reservadas a la academia y a los sabios. Las investigaciones deben superar los paradigmas hegemónicos y dar paso al protagonismo de los saberes, las prácticas y la memoria popular.
Fuente: Aporrea.org

1 comentario:

Lucas Blanco Acosta dijo...

Las Falsas Independencias y sus Bicentenarios

La mayoría de acontecimientos que se usan como paradigmas de adoctrinamiento, siempre esconden una historia secreta y tienen el propósito de subvertir la realidad del pasado, desincronizándola y reprogramándola, para usarla torcidamente; con el fin de despojar derechos y bienes intrínsecos de los pueblos; eliminar competencias e instaurar autoridades en diferentes bandos, representándose estas como autónomas, pero engañosamente genuflexas a sus secretos mecenas; a quienes terminan beneficiando, para perplejidad y desconcierto de sus ingenuos seguidores.
Las independencias de los países americanos y sus falsa repúblicas, no fueron otra cosa que un nuevo instrumento de esclavización, ya no a las monarquías europeas clásicas; fue un neoesclavismo basado en el financiamiento y la deuda, en la provisión de armas y ejércitos; y para que no les faltaran razones a los pueblos para usar y depender de todo esto, también les facilitaron los idealismos de derecha y de izquierda, y hasta los del centro. Cuando supuestos nacionalistas confiesan al mundo que solo le compran armas al oriente o al occidente, descaradamente mienten; porque la banca mundial y la industria bélica de la derecha y de la izquierda en todo el mundo, es una sola. Representada por más de dos siglos por el pulpo bancario llamado: La City de Londres o la Banca Rothschild.
El fundador de la dinastía bancaria M.A. Rothschild, engendró 19 hijos, que en su mayoría fueron distribuidos en el mundo, principalmente en Europa; para encubiertamente consolidar su obtenida influencia financiera, fue la principal beneficiaria de las independencias americanas y de la misma revolución francesa o de la ridiculización de las monarquías para lograr su desmantelación en “repúblicas”; su fortuna fue producto del desfalco al príncipe Federico Guillermo III de Prusia en su exilio; y del alquiler de tropas, armas y préstamos bancarios, en guerras creadas entre Estados, con el objeto de financiar ambos bandos. Para fortalecerse más que las mismas monarquías y empezar a establecer su centro de operaciones globales, en 1806, desde Inglaterra; así la Casa Rothschild tomó encubiertamente el control de la economía de Europa y América, hasta hoy. Empezando a establecer en el mundo una nueva monarquía mundial secreta; la financiera.
El barón M.A. Rothschild profesaba:
“Denme el control sobre la moneda de una nación y no me importa quién haga sus leyes.”
Es importante destacar que hubo tres factores comunes en la iniciación de todas nuestras “repúblicas”; el primero fue la solicitud de créditos financieros por parte de todas estas nuevas naciones a la Banca Rothschild y su indefinitiva dependencia económica a ellos o el inicio del esclavismo moderno, porque prácticamente las nuevas naciones se autohipotecaron a la Bolsa de Londres; el segundo fue la provisión y presencia de armas y tropas inglesas en nuestras supuestas independencias, prueba insigne de la nueva transferencia o encubierta colonización; el tercero es que fue un proceso de “emancipación” que no tardó en quedar completamente controlado por los miembros de la Logia Masónica Lautarina, dirigida también desde Londres por redes internacionales secretas, genuinos gestores por grados, de los destinos y la consolidación de un gobierno mundial o esclavización de todos los pueblos.